Hoy hay sunset en Lahaina, y estoy escuchando Elmo's Song mientras escucho el karaoke improvisado de Melissa y Amelia, la parte de Elmo les sale muy bien debo decir, el problema es que me dejan a mí todas las imitaciones de voces, y Gruber, Gunther y Cookie Monster pueden ser cubiertos con tu espectro musical que tanto ron con hielo y coca cola te dejaron, pero Abby y Elmo son otro nivel, asume el rol, aplaude y lanza un falseto desesperado.
Lo bueno de los sunsets en Lahaina es que a veces son lentos y dejan escribir un poco más, ahora el Cookie Monster nos da una clase de simpleza en cuanto al entendimiento de la vida al decirnos que C Is for cookie and that's good enough for him, y si, a veces que algo sea así es suficiente para hacerte feliz.
Te sigo escuchando con Amelia mientras se bañan, no voy porque por un lado si lo hago el cuento se acaba y por otro porque esto de ser una suerte de espía de su juego de a dos me da cierta satisfacción, no reconozco la canción, tu tampoco, te escucho balbuceando cosas que no tienen nada que ver con la letra y recuerdo porque te amo tanto, y de repente ella habla y se ríe y todo se ilumina y entiendes la referencia de Monster Inc en ese mismo instante, y si, te acaba de caer de golpe, la gente de Pixar sabe, debe haber un papá en la gente de producción, luego la escuchas a ella, repitiendo el remedo de palabra, y pues no, los sunset de Lahaina son hermosos pero no tan eternos, y te olvidas que el sol se puso hace mucho y solo te enfocas en los besos que le da, en el sonido de su voz cuando te dice Amorcitooooo porque quiere ayuda para salir de la tina y te das cuenta que los sunsets de Lahaina pueden esperar, pero el amanecer de tus días no. Ya voy amor.
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